Ana Rubio Catalá lleva alrededor de 25 años montando, junto a su hermana, un puesto en el mercado del paseo marítimo de Puerto de Sagunto. Para renovar sus licencias, los vendedores de este mercado se someten, año tras año a una baremación. Deben cumplir unos requisitos para obtener una autorización que les permitirá montar su puesto. Como los demás vendedores de este mercado, Ana teme quedarse sin su licencia, como ha visto a otros hacerlo.
En 2012 se redacta el Decreto Ley 65/2012 por el cual se regula la venta no sedentaria en la Comunidad Valenciana. El decreto propone que los mercados considerados «extraordinarios», teniendo una periodicidad conocida y en un emplazamiento previamente determinado, se consideren periódicos. Además el decreto dictamina que las autorizaciones municipales para el desarrollo de la actividad comercial se concedan por un plazo de quince años.
Sin embargo, y a pesar de que el mercado estival de Puerto de Sagunto se repite cada año en la localidad, en la ordenanza municipal se estipula como extraordinario y no se puede aprovechar de este decreto. «El mercado lleva celebrándose una vez al año, en los meses de verano, durante más de 30 años, ¿Cómo no vamos a considerarlo periódico?», explica Rubio.
Los comerciantes del mercado estival de Puerto de Sagunto, ahora reunidos en la Asociación de Vendedores Artesanos de Sagunto (AVAS), exigen que, por sus características, se reconozca en la ordenanza municipal esta instalación como fija y no estacional. «Nosotros somos gente que vivimos de las épocas estivales, supone el 80% de nuestro presupuesto, que se reconociera la instalación del mercado como fija nos daría una estabilidad que ahora no tenemos», asegura Ana Rubio.
Tras una moción presentada en 2014 por los partidos de la oposición, que todavía no ha sido ejecutada, la asociación se ha visto obligada a emprender acciones judiciales mediante la presentación de un recurso contencioso-administrativo contra el Ayuntamiento para exigir estabilidad de su trabajo. «Lo hemos solicitado por registro de entrada y ante la negativa del consistorio, no nos ha quedado otra que la vía del contencioso, que es donde nos encontramos ahora», apunta Ana Rubio, que además actúa como vocal de AVAS, y añade: «Lo que pedimos es lo que con el decreto se nos viene dado, nada más».
Ante estas declaraciones, la concejala de Mercados del Ayuntamiento de Sagunto, Concha Peléz, asegura que «aunque se aprobó la moción, la legislación nos impide llevarla a cabo». En un comunicado remitido a los medios de comunicación, la edil exponía los motivos por los que no se podían atender las peticiones del colectivo y señalaba: «por la ubicación en la que se encuentra, no puede acogerse a dicha disposición, ya que este emplazamiento es territorio de dominio marítimo terrestre, por lo que corresponde a la Demarcación de Costas, la cual ha concedido al Ayuntamiento de Sagunto, tradicionalmente, autorizaciones anuales para la celebración de dicho mercado en la zona indicada».
Los puestos del mercado de verano de Puerto se sitúan en terreno de dominio público marítimo y terrestre, que es competencia de Costas. Pero los vendedores aseguran que durante una reunión con el señor Vicente Ibarra, jefe de la demarcación de costas, quedó claro que la normativa permitía que se pudieran conceder las autorizaciones por un periodo de cuatro años prorrogables. «Nos dijo que mientras lo solicitara el ayuntamiento se podían hacer», detalla Ana Rubio, lo que les aseguraría la continuidad de sus actividades.
Desde la asociación aseguran que detrás de toda esta situación se encuentra una voluntad privatizadora del ayuntamiento. «Lo que están haciendo es una táctica de desprestigio hacia el mercado y que la única solución que quede sea privatizarlo. Cada año se presentan varias asociaciones que se presentan para gestionar el mercado». La oposición coincide con ellos «Sospechamos que detrás de todo se esconde la intención del equipo de gobierno de privatizar un mercado que durante más de 30 años se gestiona de manera pública», asegura Cristina Rodríguez, edil de Compromís.
A pesar de todo, la edil de Mercados, ha asegurado que el gobierno ha trabajado por la promoción y protección del mercado. Dice haber presentado diversos proyectos para mejorar la estética de estos mercados aunque finalmente no se han podido llevar a cabo por falta de respaldo. Además, en la carta informa de haber llevado a cabo «modificaciones en las bases de los mercados, con el objetivo de dar prioridad a los vendedores residentes en el municipio». Pero posteriormente, y obligados, dice, por la entrada en vigor de la Directiva Bolkestein tuvieron que volver a ser modificadas dichas ventajas.
Según la Asociación de Vendedores Artesanos de Sagunto, tras la llegada del Gobierno Popular, se cambiaron unos criterios de baremación, que hasta entonces habían valorado la antigüedad de los puestos, la antigüedad en el Impuesto de Actividades Económicas (IAE) y si estaban empadronados en el municipio. «La Directiva Bolkestein no era una ley, sencillamente eran unas directrices que el gobierno modificó a su antojo», asegura Ana Rubio.
Este no es el primer choque entre los comerciantes y el consistorio saguntino. Ya en 2009 se planteó un traslado del mercado marítimo al Pantanar. Los vendedores reaccionaron con una huelga y una recogida de firmas que finalmente no pudo frenar el desplazamiento del mercado. El año siguiente tras un acuerdo plenario el mercado pudo volver al paseo.
Los partidos de la oposición apoyan las reivindicaciones de los comerciantes del mercado marítimo y así lo han hecho saber a través de diversas cartas en las que defienden el cumplimiento del acuerdo plenario para la aplicación del decreto 65/2012. La concejala Natalia Antonino, del grupo municipal socialista denuncia que «son todo excusas para no dar autorizaciones de una mayor duración. No entendemos cómo en otros Ayuntamientos, gobernados por el PP se está aplicando el decreto y en este municipio se sigan poniendo trabas».
Compromís por su parte también respaldan al colectivo y se muestran rotundos en sus declaraciones: «La estabilidad laboral nos preocupa mucho y no entendemos como no quieren aplicar una ley que ayudaría a muchas familias de nuestro municipio», apunta Cristina Rodríguez, concejala del partido nacionalista.
AVAS echa de menos una vía comunicativa abierta y directa con las autoridades es por eso que ha solicitado formar parte del consejo asesor del ayuntamiento en cuanto a comercio se refiere porque aseguran que es muy importante que tengan una representación en él.
Señala el Decreto Ley 65/2012 que el mercado constituye una modalidad de venta tradicional con fuerte arraigo en los municipios valencianos y que por su notoriedad se ha consolidado como complemento de la actividad sedentaria. Es por ello que debe poder desarrollarse bajo los mismos principios de «competencia, competitividad y eficacia independientemente de su apariencia ancestral». La Delegada de Mercados concluía en el escrito que «la Demarcación de Costas nos ha autorizado por un año el mercado de Semana Santa, por lo que el ayuntamiento de Sagunto está gestionado la posibilidad de que dichas autorizaciones sean de hasta 4 años tal y como indica la nueva legislación». Los vendedores consideran que se ha vulnerado su derecho al trabajo y piden que se solucióne cuanto antes.
