La nueva tasa de basura aprobada esta mañana rebaja el recibo de los ciudadanos de los 71,50 euros hasta los 66,50, si bien habrá bajadas más apreciables para los comerciantes de la ciudad. No obstante, según señalan algunos de los concejales, el efecto final en el gasto de los ciudadanos queda en manos del consorcio, cuyo convenio ha sido impugnado en un contencioso por parte del ayuntamiento de Sagunto. La rebaja del recibo se debe a dos factores: el aumento del número de usuarios, que reparte la carga del coste entre más personas, así como una reducción del cálculo que se ha hecho sobre cuanta basura genera cada tipo de negocio, un cambio cuya autoría reivindica Compromís.
Como afecta a los negocios
La nueva tasa reduce los costes a los hoteles de la ciudad, pasando de 185,90 los más pequeños a 172,90, el descenso en todo caso se va notando más en los establecimientos más grandes, los que tienen entre 21 y 50 plazas, pasan de 679,25 a 631,75, los de 51 y 75 verán como pasan de pagar 1966,25, para abonar 3.391; mientras que el auténtico alivio llega para los hoteles de más de 75 habitaciones que pasan de 10.796,50 euros a los 3.391,50 en su nuevo recibo. Una medida que ha sido defendida por el edil Sergio Muniesa explicando que cuando se calcularon los volúmenes de residuos de este tramo sólo existía un hotel de estas características en el término municipal, y que ahora hay más. «No tiene sentido que una habitación de más o de menos suponga una diferencia de casi 9.000 euros en la tasa de basuras» ha explicado el concejal de presidencia.
La nueva tasa reduce los costes a los hoteles de la ciudad, pasando de 185,90 los más pequeños a 172,90, el descenso en todo caso se va notando más en los establecimientos más grandes, los que tienen entre 21 y 50 plazas, pasan de 679,25 a 631,75, los de 51 y 75 verán como pasan de pagar 1966,25, para abonar 3.391; mientras que el auténtico alivio llega para los hoteles de más de 75 habitaciones que pasan de 10.796,50 euros a los 3.391,50 en su nuevo recibo. Una medida que ha sido defendida por el edil Sergio Muniesa explicando que cuando se calcularon los volúmenes de residuos de este tramo sólo existía un hotel de estas características en el término municipal, y que ahora hay más. «No tiene sentido que una habitación de más o de menos suponga una diferencia de casi 9.000 euros en la tasa de basuras» ha explicado el concejal de presidencia.
El resto de negocios, cuya baremación detallada pueden encontrar en el archivo adjunto a este artículo también experimentan una mejora. Los bares, heladerías, y chocolaterías, pasan de 607,75 euros a 565,25 euros, los comercios de alimentación pagarán, en función de su extensión una tasa que irá de los 305,90 de los más pequeños hasta los 9.642,50 euros de los más grandes (por debajo de los valores que estaban hasta ahora que iban de los 328.90 y los 9,724 euros); mientras que los locales de comercio y servicios pasan de los actuales 233,09 euros a 216,79 euros.
También baja la tasa para aquellos locales que no tengan actividad, que se fija en 46,55 euros, aunque se recuerda que habrá que notificar la no existencia de actividad en el local para que se le pueda aplicar esta tasa.
La tasa baja para todos los tipos de actividad aunque, esa bajada, resulta menos acuciada para bancos e hipermercados, cuyo ajuste, aunque les beneficia, reduce considerablemente su margen frente a su previsión inicial. De esta manera la tasa para hipermercados se queda en 27.930 euros (frente a los 28.028 del año pasado), y la de establecimientos bancarios que queda en 3.192 euros cuando hasta ahora pagan 3.217 euros.
Desde Compromís reivindican su papel en la bajada
El hecho de que haya negocios que vean bajar más que otros su basura es atribuido al recálculo de la cantidad de basura que genera cada comercio, y que el grupo municipal de Bloc-Compromís reivindica como iniciativa suya. Los miembros de la coalición nacionalista se declaran más partidarios de los modernos sistemas de recogida que permiten controlar los vertidos de cada ciudadano logrando que no sólo la gente pague sólo por lo que usa el servicio, sino que incluso se beneficie de un menor precio quien más usa los contenedores de reciclaje, pero ante la imposibilidad técnica de aplicar esa tecnología han demandado una baremación más justa de lo que vierte cada negocio, un parámetro que, según asegura la concejal Teresa Garcia no se tocaba desde 1998.
El hecho de que haya negocios que vean bajar más que otros su basura es atribuido al recálculo de la cantidad de basura que genera cada comercio, y que el grupo municipal de Bloc-Compromís reivindica como iniciativa suya. Los miembros de la coalición nacionalista se declaran más partidarios de los modernos sistemas de recogida que permiten controlar los vertidos de cada ciudadano logrando que no sólo la gente pague sólo por lo que usa el servicio, sino que incluso se beneficie de un menor precio quien más usa los contenedores de reciclaje, pero ante la imposibilidad técnica de aplicar esa tecnología han demandado una baremación más justa de lo que vierte cada negocio, un parámetro que, según asegura la concejal Teresa Garcia no se tocaba desde 1998.
La baremación implica asignar a cada negocio una cantidad por la que se multiplica el precio de una vivienda particular, en este sentido Garcia reconoce que, «debido a la premura», no se ha realizado un estudio económico sobre los vertidos, pero consideran que «no hace falta para saber quien vierte más o menos», resaltando además que «la cobertura de la nueva tasa esté en el 99,14% del servicio». Según asegura la edil a la hora de baremar se ha tenido en cuenta quien puede asumir más el coste y quien no, para buscar beneficiar a los comerciantes con menos posibilidades frente al poderío económico de grandes superfícies y bancos.
El consorcio aún puede hacer subir el recibo final
A pesar de la bajada de la tasa, algunos ediles se muestran no demasiados ilusionados con el resultado en el recibo final, según aseguran, y a pesar del recurso impuesto al consorcio zonal de residuos, el precio final del recibo podría subir si no se llega un acuerdo antes de final de años con los actuales gestores de la planta de residuos de Algimia.
A pesar de la bajada de la tasa, algunos ediles se muestran no demasiados ilusionados con el resultado en el recibo final, según aseguran, y a pesar del recurso impuesto al consorcio zonal de residuos, el precio final del recibo podría subir si no se llega un acuerdo antes de final de años con los actuales gestores de la planta de residuos de Algimia.
El concejal de Esquerra Unida López-Egea ha asegurado que aunque el ayuntamiento no va entregar el ecoparque al consorcio, y la bajada de tasas aprobada hoy, se puede dar la paradoja de que el gasto final del usuario se incremente «aunque levemente gracias a esta subida». Según explica el edil, al cobrar el ayuntamiento unos servicios, y el consistorio otros habrá que llegar un acuerdo para evitar que se dupliquen conceptos en el recibo.
